CON UN SOLO CLIC

Actualmente estamos siendo “invadidos” por la globalización. Ya no estamos lejanos a todo el sistema de Internet, de la telefonía móvil y hasta la televisión digital. Estamos dentro de un sistema que sin estas 3 grandes revoluciones, no seríamos lo que somos hoy en día.

Internet, nos da la herramienta de conocer cosas que antes era realmente inimaginable. Con un solo clic, podemos navegar desde nuestra casa hasta los rincones más escondidos de África o recorrer las siete maravillas del mundo en menos de una hora.
Pero… ¿Qué pasa cuando queremos ser dueños de un sitio y ser reconocidos?
Eso es lo que Patricio Astorga, un “genio de la computación” nos explicó.


Muchas veces nos hemos preguntado como un sitio Web llega a ser tan grande y popular en Internet. Así mismo no entendemos como suben los contenidos y como hacen para posicionarse como grandes líderes, pero acá le damos la llave para poder entenderlo libremente.

Patricio Astorga nos señaló las tres claves para tener un sitio Web:
Primero que todo hay que comprar un dominio (lo que va entre www y el .cl), tener en cuenta como se va a llamar nuestra página Web y pensar arduamente cuáles van a hacer los contenidos que queremos dar a conocer a toda la audiencia cibernética.
Segundo y para poder subir material a la página es necesario tener un hosting. Al comienzo suena muy extraño, pero luego entendemos que el hosting es una de las herramientas vitales para tener una página Web. El hosting hace que nuestro dominio tenga capacidad para subir archivos, fotos o lo que queramos. Es como un “súper computador” que nos entrega la herramienta básica para poder construir y seguir en nuestro sueño.
Por último y no menos importante es el contenido. Esto hace que nuestro sitio tenga vida y que –al fin y al cabo- sea lo que nosotros queramos.

Hoy en día vemos como el Internet es una de las principales herramientas para la comunicación, una que sin duda separó al mundo en dos.
Nosotros tenemos esa herramienta en nuestras manos con un solo clic, podemos construir un sueño, llegar a posicionarnos en Google y llegar a ser –quizás- lo que siempre quisimos, unos comunicadores del siglo XXI, por medio de un clic, un dominio y mucho interés de compartir lo que anhelamos que sea escuchado.